Ubicada en el sector de la Villa Olímpica, zona de los escenarios deportivos, en donde se encuentra el estadio de béisbol que lleva el nombre de Abel Leal. Pareciera que la estatua fue levantada a machetazos y se le llevaron hasta el bate. Por Luis Miguel De Avila Rodríguez.
Cartagena-Colombia-Noticias625.co 12-06-2021. En desarrollo de las manifestaciones sociales que se cumplen en el país se han tumbado monumentos de conquistadores, expresidentes y políticos, en Manizales, Cali, Pasto Neiva. En Cartagena fue la excepción. El hampa que domina los alrededores del estadio de Béisbol, dónde está instalada la estatua del beisbolista Abel Leal, decidió destruir el monumento.
El afán era «sacar el bronce» de la estatua para llevarlo a las chatarrerías, adquirir dinero y darle rienda al bazuco, crak y marihuana.
Lo que no sabían los delincuentes es que las estatuas no son elaboradas en bronce ni cobre, sino una aleación de resina de carbono, fibras naturales con pátinas (especie de baño en bronce y cobre).
La estatua de Abel Leal, resistió la golpiza a punta de martillo y machete por parte de los delincuentes desesperados por el material.
Lo único que lograron fue el bate de aluminio que tenía apretado entre sus manos el beisbolista.
Para quitar el bate dieron varios machetazos y martillazos por mucho tiempo ya que algunas personas escucharon los ruidos metálicos, pero por físico miedo no acudieron al sitio. Los desconocidos causaron destrozos en el rostro y brazos.
Es la segunda ocasión que la estatua del TIGRE Abel Leal es vandalizada.
Evaristo Gonzales, hijastro de Leal y quién fue uno de los promotores de la estatua expresó su indignación por la actitud delincuencial de los desaforados que deambulan esa zona.
Por su parte el escultor Óscar Noriega, autor de la obra exteriorizo su preocupación por la indisciplina social y falta de pertenencia. “Da tristeza, sobre todo que ahora no se sabe quién va a restaurar la estatua, porque los dineros oficiales están direccionados a controlar el Covid 19”.
Amantes al béisbol están indignados por los actos vandálicos que se consideran una falta de consideración a la memoria de Abel Leal.