Al señor brigadier general Henry Armando Sanabria Cely, comandante de la Policía Metropolitana de Cartagena, lo indujeron a cometer un error al declarar que el joven Harold David Morales Payares, se encontraba en una pelea de pandilla y que estaba armado y que por ello fue abatido. Hoy reconoce las dudas ante las presiones de la comunidad.
Cartagena-Colombia-Noticias625.co 30-08-2020. Que fácil hubiere sido para el Brigadier General Henry Armando Sanabria Cely, comandante de la Policía Metropolitana de Cartagena, decir desde un inicio que iba a investigar los hechos y no salir de inmediato diciendo que el joven Harold David Morales Payares de 17 años, participaba en una pelea de pandillas y que estaba armado y se enfrentó a la policía y por ello fue abatido. Craso error que hoy rectifica anunciando que ya está abierta una investigación para esclarecer los hechos.
“Versiones de vecinos del sector, familiares y testigos, junto a los policías que participaron en este hecho, están aportando información dentro de la investigación. Los resultados serán presentados por la Inspección General de la Policía Nacional”, puntualizó el señor brigadier general Henry Armando Sanabria Cely, comandante de la Policía Metropolitana de Cartagena de Indias.
“La Policía Nacional garantiza siempre el respeto a los derechos humanos, y por supuesto la imparcialidad en las investigaciones y la búsqueda de la justicia y la verdad”, afirmó el alto oficial.
Esto se logró gracias a las presiones ciudadanas que desde el mismo día de los hechos salió a contradecir las informaciones del comandante de la policía y a gritar en la calle con velas encendidas justicia, justicia, justicia.
Los hechos ocurrieron el pasado lunes 24 de agosto, en el sector de las casas caídas del barrio San Francisco, cuando la comunidad denunció que el joven futbolista se encontraba lavando una motocicleta, cuando llegó el agente de policía de apellido Parra, quien lo increpó y cuando el joven salió corriendo, lo persiguió y le disparó. Ese fue el reclamo de la comunidad, que hoy tranquiliza los ánimos, al anunciar que ya existe una investigación y que no se trató de un enfrentamiento entre pandilleros y policías.
Con total contundencia, avanzamos en un proceso de investigación objetivo, contando con las evidencias y testimonios de la comunidad y de policías que conocieron el caso, lo cual conducirá a tener certeza de lo ocurrido. Dice el comunicado de la Policía.