Rubén Darío Barón Hoyos, otra víctima del sicariato en La Boquilla

La Policía Metropolitana de Cartagena dio a conocer la captura de tres presuntos implicados en este crimen ocurrido a las 9:30 de la noche del sábado por la Carrera Séptima, muy cerca del campo de softbol de La Boquilla.

Cartagena-Colombia-Noticias625.co 07-04-2024. A Rubén Darío Barón Hoyos de 55 años de edad, lo sorprendió la muerte cuando se encontraba sentado en una silla plástica, en un establecimiento esperando clientes para hacer una carrera como mototaxi, actividad que combinaba con la celaduría de unos predios en el sector de Villa Gloria del corregimiento de La Boquilla a sólo cinco minutos de Cartagena.

Este hecho se registró a las 9:30 de la noche del sábado 06 de abril de 2024, por la Carrera Séptima, muy cerca del campo de softbol y de acuerdo con la información que suministró la Policía de Cartagena, en una rápida reacción, se dio captura a tres personas, quienes presuntamente habrían participado en este hecho de sangre.

Así mismo, se dio a conocer que el occiso tenía anotaciones judiciales por porte ilegal de armas de fuego y violencia intrafamiliar.

Los capturados fueron dejados a disposición de la Fiscalía General de la Nación, a la espera de las audiencias preliminares que definan su situación judicial.

Para los habitantes de La Boquilla, este hecho, los sorprendió y lo lamentan; toda vez, que Rubén Darío Barón Hoyos, reside en este corregimiento hace más de 20 años, se desempeñó como celador del Museo Arqueológico de La Boquilla, lugar enclavado en la ciénaga de La Virgen, al norte de Cartagena.

Así mismo, se desempeñó en actividades sociales, como por ejemplo mejorar las condiciones en infraestructura de la Institución Educativa INETEB, siempre estuvo atento a la problemática de la elección del Consejo Comunitario de La Boquilla, llamando a la unión de los lideres y últimamente se dedicaba al mototaxismo.

Por redes sociales extraoficialmente se da a conocer que el atentado contra Rubén Darío Barón Hoyos, presuntamente obedece a una retaliación de organizaciones criminales, por ser presunto colaborador del Clan del Golfo y se muestra un panfleto que al parecer dejaron sus asesinos en donde presuntamente actuaron a nombre de la organización criminal “Los Salsa” de México.