Cartagena-Colombia-Noticias625.co Nos encontramos en cualquier esquina y en abundancia en las redes sociales un sinnúmero de voces y mensajes que aducen estar cansadas de la clase política dirigente que ha llevado a la postración de la ciudad. Y ese pueblo noble y con ansias de cambio siempre cae en la trampa.
Por eso, es que los analistas y asesores políticos ahora emplean la estrategia de la neuropolítica, que relaciona cerebro y política. Definiríamos a esta disciplina como aquella que se apoya en los estudios de la neurociencia que puedan aplicarse a los campos de la actividad política, es decir: comportamiento de los ciudadanos, partidos políticos, electores, activistas, políticos, líderes etc. Es una jugada política.
Estos expertos saben que es lo que quiere escuchar el pueblo y cómo manejar sus emociones: ¿Qué relación hay entre cerebro y política? ¿Cómo decidimos el voto? ¿En qué medida intervienen las emociones? ¿La genética nos condiciona? ¿Nos pueden persuadir fácilmente? ¿Votamos sólo por intereses?
Esta estrategia de decir y repetir y repetir quien es el malo, quien se ha robado plata, quien es el corrupto, quien es el responsable que los puestos de salud, las escuelas y hospitales estén postrado; no es nada nueva y ha puesto alcaldes en Cartagena por ejemplo: Guillermo Paniza Ricardo, Judith Pinedo Flórez, Campo Elías Terán Dix, Dionisio Vélez, Manolo Duque y a William Dau.
Guillermo Paniza Ricardo en el año 1995 se enfrentó Héctor García Romero, quien representaba a la clase política y le ganó en franca lid, con el discurso que se han robado la ciudad y hoy se encuentra exiliado. Pidió facultades al concejo para la privatización de Telecartagena y fue quien terminó la fase final de entrega de las Empresas Públicas Municipales, que también quedó en manos privadas en una empresa de economía mixta.
Judith Pinedo Flórez en el año 2009, se convirtió en la única mujer alcaldesa que ha durado los 4 años y le ganó a Juan Carlos Gossain Rosnini, con el mismo discurso de la anticorrupción. Gossain representaba a la clase política. Y Judith Pinedo “La Mariamulata” hoy se encuentra envueltas en procesos judiciales entre el que se destaca la venta de un pedazo de playas.
Campo Elías Terán Dix, en el año 2012 empezó su gobierno, luego de haberle ganado a la peso pesado María del Socorro Bustamante, apoyada por la clase política y ganó el mismo discurso de la anticorrupción y desprestigio. Campo que en paz descanse terminó envuelto también en las mieles de la corrupción.
Dionisio Vélez Trujillo, quien ganó la Alcaldía de Cartagena el 14 de julio de 2013 en medio de elecciones atípicas a María del Socorro Bustamante Ibarra, quien seguía llevando el sello de la clase política y por eso se impuso la figura joven de Vélez, quien trabajó el mismo discurso. Vélez Trujillo afronta serios procesos judiciales, disciplinarios y fiscales por el manejo del empréstito de los 250 mil millones de pesos.
Manuel Vicente Duque Vásquez, Manolo Duque, le ganó en el año 2015, al ex concejal Antonio Quinto Guerra Varela, quien también tenía el sello de la Clase política. Y Manolo como figura joven le ganó a un veterano político con el mismo discurso del cambio. Duque no terminó su gobierno, estuvo preso, renunció y tiene problemas con la contratación del PAE.
Hoy William Dau Chamatt, hombre que le ganó a la súper campaña de William García Tirado, quien tenía todo el respaldo de la clase política, con el mismo discurso de anticorrupción. No ha sido suspendido pero sus primeros actos de gobierno, con el nombramiento de varios de sus colaboradores y los contratos que ha entregado, lo tienen en la mira de los entes de control, más las múltiples denuncias que pesan contra él por injuria y calumnias, que acostumbra a decir por redes sociales y micrófonos de medios nacionales.
En fin somos emotivos al momento del voto. No votamos por los Programas de Gobierno, poco nos importa eso y de nuevo el pueblo cayó en la trampa. “Desprestigiar a la Clase Política + Corrupción = Corrupción”.